El ministro de Economía, Luis Caputo, manifestó sentirse "cómodo" con el valor actual del dólar, que se sitúa en torno a los $1500 en el mercado previo a las elecciones. Caputo afirmó que este valor está "holgadamente arriba" de lo que debería ubicarse.
A pocos días de las elecciones nacionales, el ministro confirmó una nueva intervención del Tesoro de Estados Unidos en el mercado cambiario, y estimó el monto en "alrededor" de U$S400 millones. Además, negó posibles cambios en su equipo económico tras los comicios.
“Estoy más que cómodo”, aseguró Caputo al respecto del valor del dólar oficial. “La moneda es un reflejo de cómo te va en la economía. No es una casualidad que heredamos un tipo de cambio real más alto, allá arriba, con la economía hecha pomada. A las economías que les va bien tienen una moneda más fuerte“, agregó.
Las diferencias con la gestión de Macri
Caputo defendió el tipo de cambio actual, con el argumento de que refleja la mejora en la economía argentina. Comparó la situación actual con la gestión de Cambiemos, al señalar que, a diferencia de entonces, hoy existe superávit fiscal y un menor déficit de cuenta corriente.
”Cuando se salió del cepo con Mauricio Macri había un tipo de cambio que hoy sería de $1280, pero Macri tenía seis puntos de déficit fiscal y tres de déficit de cuenta corriente. Hoy tenemos superávit fiscal y un punto de déficit de cuenta corriente, que se usa para financiar al sector privado. Tenemos una situación muchísimo mejor“, remarcó.
El ministro enfatizó que el esquema cambiario se mantendrá sin cambios después de las elecciones. De ese modo descartó una devaluación. Destacó el respaldo financiero de Estados Unidos como un factor clave para la estabilidad económica.
“Estamos en un esquema de bandas perfectamente calibradas, un Banco Central capitalizado, fundamentos económicos y un soporte financiero de Estados Unidos como ningún país en el mundo recibió, ni siquiera México en el 94. Estamos frente a una oportunidad histórica. El país más importante de mundo está diciendo: ‘Quiero que le vaya bien a los argentinos’”, insistió.
El funcionario criticó a los economistas que prevén un aumento del dólar después de las elecciones, al acusarlos de promover un modelo económico obsoleto basado en salarios bajos y una economía cerrada. Además pidió que "la gente sepa que nada va a cambiar" y acusó además de a los economistas mediáticos, también a la prensa. “Vos ponés cualquier canal en cualquier horario y están metiéndole temor a la gente. Yo que soy el ministro digo que no cambia nada (después de las elecciones). La competencia es un poco desleal, no puedo estar todo el tiempo en los canales diciéndolo”, planteó.
El ministro también abordó la cuestión de la credibilidad en Argentina, al enfatizar la necesidad de reducir la volatilidad política.